21.7.11

Star Crusade #12

“Secretos”
Historia: Rodrigo Roa.

I

- La verdad, aún no entiendo lo que está sucediendo aquí, pero no parece nada bueno. ¿Qué tienen que ver los Guerreros Más Peligrosos del Universo con la recolección de Energía Cor? ¿Y qué buscaban liberando a Tak?

Las preguntas que se hacía Var-Sokk representaban las dudas de toda la tripulación de la nave de la Policía InterPlanetaria, que ahora se dirigía a Nulm, tras dejar a Nurlabe asegurado en la Prisión.

Su nueva ruta obedecía a la persecución del grupo de villanos más buscados del cosmos, conocidos simplemente como los Guerreros Más Peligrosos del Universo, quienes habían atacado la Prisión InterPlanetaria de Alta Seguridad con el objetivo de liberar a dos peligrosos criminales de guerra, Seed Breem y Tak.

Pero las causas de esto permanecían en el desconocimiento. ¿Por qué ahora? Todo parecía estar conectado de alguna extraña manera, y ya casi no había dudas de la existencia de una conspiración relacionada con la Energía Cor dispersa en el espacio.

Ahora se dirigían a Nulm, en el sistema Polaris, considerado como el planeta más hermoso del universo, un lugar pacífico y lleno de vida. No podían permitir que los habitantes de ese mundo fueran víctimas de un conflicto oscuro y secreto, en el que no tenían nada que ver.

Por ello había cierto nerviosismo en los policías, además de Will Bowman, Var-Sokk y Overtaker. Sabían el nivel de los enemigos a los que enfrentarían y los peligros que corrían ellos, y el universo completo.

Para distender un poco el ambiente, el héroe del planeta Surn se acercó a Will.

- ¿Cómo vas con el control de tus habilidades? – le preguntó amablemente.

- Creo que logro conocerlas un poco mejor… Quiero lograr hacerlo antes de que lleguemos a ese planeta, Nulm… Quiero ser de utilidad de ahora en adelante…

- No te presiones – dijo el defensor – Los villanos con los que lidiamos son los mismos que causaron el inicio del caos durante la Guerra Universal de hace unos años…

- Lo sé. Por eso sé cómo debo actuar… - dijo Will – Verás, hace tiempo, el héroe más grande de mi planeta, el Capitán Cometa, me salvó la vida. Desde ese día, he procurado seguir su ejemplo en mi vida. Y ahora, tengo la oportunidad de hacer mucho más… seguir su ejemplo, literalmente.

- ¿A qué te refieres, Will? ¿Qué harás?

- Pelearé. Los ayudaré. Ah, y a partir de ahora, puedes llamarme Nova.


II

La sala del Consejo InterPlanetario era monumental, gigantesca. La vista no alcanzaba a distinguir el techo, y sólo con un esfuerzo visual se podían abarcar las dimensiones del lugar.

Nishke y el Oficial Lurk fueron guiados por Cludvor hacia este lugar, hasta quedar ubicados en una especie de estrado, muy iluminado, en el centro de la sala. Alrededor de ellos, los sillones de cada miembro del Consejo, iluminados con luces de colores, que eran tan diversos, que algunos de ellos no habían sido vistos por ningún ser mortal.

- Nishke, Príncipe de Uda, bienvenido al Salón del Consejo InterPlanetario. Entendemos que tus razones para venir hasta aquí deben ser de gran importancia y urgencia, por lo que hemos decidido escucharlas – dijo Lorgann, líder del Consejo, con voz ceremonial.

- Así es, señores del Consejo: están pasando cosas muy extrañas en el universo, y creemos que detrás de ello hay más de lo que sabemos… - comenzó a explicar Nishke – Con mi compañero aquí presente, creemos haber descubierto algo que ustedes deberían aclararnos…

- Habla, Príncipe de Uda…

- Los ataques a las patrullas policiales, el robo de Cristales de Cor, el ataque a la Prisión del que oímos por la radio… Sospechamos que todo esto ha sido perpetrado por una raza que “no está registrada” en ninguna base de datos… - explicó el príncipe - Pero estoy seguro que ustedes saben al respecto, ¿no?...

Los miembros del Consejo se miraron entre sí, y hubo un leve murmullo en el Salón. Luego, silencio. Lorgann volvió a hablar.

- Pues bien… Creo que de todas formas ya es hora de que todos lo sepan… - suspiró, y  luego siguió - Por el bien del universo, les contaremos la historia no conocida de los sistemas de Ursa Maior…

III

Planeta Zidril, sistema Alioth, constelación Ursa Maior.-

En el puerto espacial, los movimientos se multiplicaron. Los operarios corrían en todas direcciones, y los preparativos no cesaban.

En una de las pistas secundarias, una pequeña nave con forma de cohete hacía su entrada, y era recibida por un laborioso contingente de diversos seres, de una variedad de razas, entre ellos el científico del planeta Auxhiv, Bumasunoliumbh, quien esperaba este arribo con júbilo.

Dentro de la nave, Rbn Olietunl, también científico, y también originario del planeta Auxhiv, en el sistema Megrez, configuraba un curioso recipiente, de gran tamaño, con un conocido ocupante en su interior.

- Señores… Aquí dentro se encuentra el resultado de nuestra experimentación de milenios… - explicó con entusiasmo el alienígena de forma insectoide, apenas descendió de su nave - ¡El ser terrícola conocido como “Quasar”! ¡Nuestra arma definitiva! *

Algunos de los presentes exclamaron gran sorpresa y alegría, sobre todo Bumasunoliumbh… pero pronto desviaron su atención: en la pista principal hacía su ingreso una “nave” mucho más grande.

Talascia, la gigantesca ciudad flotante, último vestigio del destruido planeta Umnis, se acoplaba al puerto espacial.

Dirigida por Trom, y habitada por lo últimos miembros de la raza umnita, había vagado por el universo por años. Su participación en los hechos recientes era sospechada, y el héroe Hyperman, había sido enviado a investigar… pero había sido tomado prisionero en la ciudad **.

En el puerto espacial, los alienígenas conocidos como Rangg, Tinmit y Stalokh esperan la llegada de la ciudad, mientras hablan entre sí.

- Tu discípulo Nurlabe ha sido capturado, Stalokh… Pero eso no afecta en nada las siguientes etapas de la planificación – dijo Rangg, el líder del grupo.

- Es un sacrificio necesario, por un bien mayor… -  respondió Stalokh – Con la llegada de Talascia, podemos proceder con la fase final…

- … Y la distracción en Nulm será la cubierta perfecta – complementó Tinmit, quien luego fijó su atención en la ciudad y sus líderes, quienes ya descendían a la superficie del planeta – ¡Bienvenidos, hermanos! ¡Bienvenidos al nacimiento de un nuevo mundo!

IV

En el Salón del Consejo, Lorgann comenzó su narración frente a Nishke y el Oficial Lurk:

- “Hace eones, los ángeles de Azeldom descendieron en el centro del universo, para comenzar a crear el Consejo InterPlanetario. Su intención era incluir a todas las razas de todos los planetas donde existiera vida, y para ello seleccionaron al más sabio miembro de cada una de estas razas.

Viajaron a través de las estrellas, visitando uno a uno los planetas, incluyendo un nuevo miembro por cada uno de ellos, creando una congregación única de los seres más sabios del universo…

Pero al visitar los distintos planetas para hacerlos parte del Consejo, no consideraron un pequeño detalle: preguntar.

Un grupo de planetas de los sistemas de la constelación Ursa Maior tenía otras ideas… y se opusieron a la llegada de los Ángeles.  Los planetas Zidril, Auxhiv, Iarh y Myodra rechazaron membrecía en el Consejo, y decidieron formar su propio orden galáctico… la Asociación Estelar Ursa Maior. De entre los planetas de esa constelación, sólo Umnis, del sistema Alcor, accedió a ser parte del Consejo InterPlanetario.

Por mucho tiempo, las acciones de la Asociación fueron un misterio para el Consejo, pero parecían no afectar el orden universal… Liderados por el poderoso Rangg, del planeta Zidril, su propio desarrollo era tan aislado, que pudimos convivir en paz todo este tiempo…”.

- Pero entonces… ¿por qué lo han ocultado? ¿Por qué nadie sabía de esto? – preguntó el Oficial Lurk.

- “Cuando Umnis provocó la Guerra Universal, tuvimos sospechas, ya que era el único planeta de Ursa Maior que sí era parte del Consejo… Y es el único mundo que alguna vez haya traicionado nuestro sagrado orden…

Decidimos investigar, pero en el más absoluto secreto… Inculparlos pudo provocar un conflicto mayor… Luego, descubrimos que no había razón para relacionar la Guerra con las acciones o intenciones de la Asociación… Por lo demás, nunca antes habíamos sido interpelados al respecto…”.

Nishke y Lurk quedaron estupefactos. ¿Cuántos secretos más existirían frente a sus ojos en el vasto universo? Sus miradas parecieron interrogar aún más a Lorgann, pero sin saber exactamente qué decir.

Pero entonces, el líder del Consejo volvió a tomar la palabra.

- “No teman, sin embargo. Hemos debatido largamente al respecto, y hemos decidido que, en vista de los eventos recientes, debemos actuar. Descubriremos la verdad detrás de todo esto, aunque debamos cuestionar la soberanía de la Asociación Estelar Ursa Maior… Vengan con nosotros… Las naves de la Policía nos llevarán a toda velocidad al lugar donde está el mayor peligro actual… Iremos a Nulm”.

V

La nave de la Policía que transportaba a Overtaker, Var-Sokk y Will Bowman (ahora llamado Nova), aterrizó suavemente en el bello planeta Nulm.

Alrededor, la vegetación era gigantesca y colorida, el verde, el azul y el rojizo de las flores eran colores llenos de vida, y la tierra parecía ser suave y cálida. A la distancia, se apreciaba la belleza arquitectónica y el brillo plateado de una enorme ciudad, brillante y muy cuidada.

Todo allí era impactante, el escenario parecía casi irreal; una selva de proporciones, con árboles gigantescos y plantas de diseños sobrecogedores, armónicamente dispuestas, que configuraban una densa espesura, aunque con caminos cuidadosamente elaborados por los habitantes del lugar.

Los policías estaban impresionados, al igual que Nova y Var-Sokk. Pero para Overtaker no era la primera vez en este lugar, por lo que no le costó mucho enfocarse rápidamente en la misión que los llevaba hasta allí.

- Muy bien, muchachos, lamento interrumpir su observación… Atentos, ahora. Nos separaremos para cubrir más territorio. Debemos encontrarlos muy rápido, y causar el menor alboroto posible.

Los policías fueron repartidos en escuadrones, y Var-Sokk y Nova fueron en otra dirección, mientras Overtaker despegó en su Motocicleta Galáctica, a toda velocidad.

El Comandante de la Policía InterPlanetaria comenzó a recorrer los senderos en medio de la selva, rastreando cuánto podía con sus instrumentos, y también con sus ojos e intuición.

Estaba preocupado por lo que podía pasar si tardaba demasiado… Ya habían dejado que les tomaran ventaja, y ni siquiera comprendían a cabalidad lo que estaba sucediendo…

Absorto en este pensamiento, Overtaker no alcanzó a reaccionar cuando un potente golpe lo derribo con violencia de su motocicleta, lanzándolo a gran distancia.

Saliendo de su escondite, en un enorme árbol del lugar, el villano conocido como Ka’li’est recogía sus brazos transformados en largos tentáculos, y se acercaba al policía, con la intención de asestarle el golpe final…


Continúa en “Quasar” #11, y en “Star Crusade” #13: La Masacre de Nulm…

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* Ver “Quasar” #10 para los detalles de su captura!
** Números recientes de “Star Crusade”.


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